domingo, 12 de octubre de 2014

abrazando bichos

Cuando estoy angustiada, cocino. No sé por qué, porque luego no como, pero cocino y luego lo reparto.
Cuando estoy triste, me abrazo a los animales. Generalmente al gato, pero si tengo acceso a más, mejor todavía. Abrazar animales calma mi dolor por segundos.
Ayer en la capea no podía cocinar, obviamente. Así que me dediqué a abrazar bichos. Toqué el morrito suave a todos los caballos que había, que por cierto eran muchos. Uno me frotó la cabeza en el brazo y me recordó a Ron cuando busca cariños. Sólo que en tamaño gigante, claro. Y les dí de comer melón. Lo admito, mangué un plato de trocitos de melón de la mesa y se lo llevé a los caballos. Y me comieron de la mano, pasando esos labios suaves por mis palmas. Me encantan los caballos, de pequeña iba a montar y me sentía libre galopando. Ojalá tuviera dinero para seguir haciéndolo de vez en cuando.
 Luego encontré un corderito muy pequeño metido en una especie de cuadra. Y lo cogí en brazos. Porque sí, porque quiero. Porque mis amigos van con sus novios o sus mujeres, pero yo abrazo ovejitas. El corderito me metía la cabeza en el cuello y se acurrucaba. Y si le acercaba un dedo, creía que era la tetilla de la madre y lo succionaba. Yo me reía y lo achuchaba. Los animales me hacen feliz. Y creo que ellos son bastante felices conmigo.  
Hasta la perra de Bombita se me acerca. La recogió de un refugio y la pobre había sido maltratada, así que aún se asusta un poco de la gente. Pero a mí desde el primer día se me acerca y me pone la cabeza en la mano, yo le acaricio con la otra y ella mueve muy tímidamente el rabo, aún entre las patas. La pobre, con lo guapísima y lo buena que es, cómo algún gilipollas pudo pegarla. Son cosas que no concibo. A ella le dí unos trocitos de panceta.
También toqué un toro. Estaba amaestrado, el dueño me contó que la madre murió en el parto y lo habían criado a biberón, así que era completamente manso. Le toqué la testuz ante el asombro de mis amigos. Qué animal tan hermoso, tampoco entiendo que ningún gilipollas quiera liarse a espadazos con él y tener el morro de decir que es arte. El toro me miraba, plantado con sus cuatrocientos kilos negros zaínos delante de mí. Y yo le pasaba las uñas pintadas de rojo por la frente de pelo arremolinado.
A veces quiero pensar que si llego a vieja cumpliré el sueño de ser una loca del coño que recoja animales y viva a su bola, con todos los gatos, los perros, las gallinas, los conejos y demás bichos que pueda recoger. Y una cabra. Y un burro. Y desde ayer empiezo a pensar que una oveja. Aunque sea el único de todos los putos sueños que llegue a cumplir. Aunque tenga que esperar a vieja para sentir que mi vida sirve para algo. Aunque ni en ese momento sea comprendida. Pero seré feliz porque cada día abrazaré a mis animales. Y el resto, cada vez importará menos.


12 comentarios:

  1. Yo también quiero una oveja!!! ¿Qué tendrán los animales que sacan lo mejor de nosotros? No en vano hay gente a la que le "recetan" tener mascotas a modo terapéutico. Un besote, guapa!!!

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    1. Yo me lo receto sola, es lo mejor y sin efectos secundarios :)

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  2. Te entiendo perfectamente...los animales (en su mayoría, salvo reptiles y las arañas...y alguno más!) me "aportan paz". Reconozco que echo mucho de menos tener perro sobre todo en los días en los que estoy más bajona, te dan amor incondicional.

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    1. Las arañas y los insectos es que no son achuchables, jeje. Yo no me imagino sin Ron cuando estoy de bajoncillo!

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  3. Pues a mí me ha dado paz tu post. Me he imaginado todo según lo iba leyendo y ví perfectamente el pelo de la testuz del toro (yo creo que lo toqué también), el cordero que buscaba calorcito y hasta esa perra traumatizada pero agradecida. Y qué razón con todo lo que dices... los toros son preciosos, es increíble que insistan en destruírlo y convertirlo en un pobre bicho jadeante y ensangrentado que muere de una forma horrible y estúpida. En fin... me quedo con la paz y el amor que describes.
    Yo creo que a los 45 ya tendrás doce gatos. Y un cordero. Y un burro (ay, con esas orejotas suaves).

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    1. Espero que sea incluso antes... Esas orejotas suaves y los demás bichos me esperan. Y me gustó mucho tocar al toro y coger el cordero :)

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  4. Qué tierno. Yo cuando estoy triste también abrazo a mi perra. Pero me ha salido una desaboría. Solo quiere que la mime cuando ella quiera. Hasta me gruñe si insisto cuando no quiere que la abrace.
    Y de voluntaria en una protectora?? Te lo has planteado?
    Un abrazo

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    1. No puedo ser voluntaria porque lo he intentado y me muero de pena y de dolor por no poder ayudar a todos, cuando los veo en mala situación lo paso fatal.
      Lástima que tu perra sea desaborida, jeje, pero bueno, seguro que te da cariño a su manera :)

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  5. Yo soy más de cabras. En RD tenía uno pequeño. Se llamaba Reda, por mi amigo la Mora.

    Los animales son tan adorables e indefensos...

    22+2

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    1. Yo también soy muy de cabras, pero no había... En mi futura casa de pueblo cuando sea una loca tendré cabras seguro!

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  6. Es que los borreguitos son taaaaan tiernos... Mi suegro trabaja en una ganadería y el otro día fuimos a ver a los toros y había un becerritooo mas monoooo ainss que pena que la madre se dió cuenta y lo escondió pero me hubiera encantado acariciarlo...
    Seguro que ese sueño lo cumples antes y para entonces igual el mundo ha cambiado un poquito y no eres tan incomprendida.
    Besotes.

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    1. Era taaaaan mono... Ains! A mí es que me gusta todo, ovejas, cabras, terneros... Espero ser una loca pronto y rodearme de animalitos :)

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