viernes, 30 de octubre de 2015

Las ofertas "bulto" y otros problemas de estar en paro

Últimamente he visto varias quejas en twitter de algo que pensé que sólo me pasaba a mí. Y lejos de consolarme con el mal de muchos, he pensado que o pasa algo raro o es que yo soy demasiado conspiranoide. Pero vamos a ver si no huele regular el tema.
Como muchos españoles, yo estoy buscando trabajo. Para mi desgracia, la crisis pegó de pleno a mi rama profesional y después de haber trabajado sin parar desde antes de terminar la carrera, me quedé en paro hace unos cuatro años. Y a veces parece que fue muy lejano y que no sirvió de nada tanta experiencia, trabajar en diferentes cosas, formarme y aprender, machacarme y dejarme la piel en lo que hacía. Pero bueno. Desde entonces he hecho cosillas sueltas, me he sacado varios cursos, me he apuntado a inglés y para pagarme las facturas he trabajado con mis padres. Pero no mola. Yo quiero un trabajo normal, de gente normal. No quiero estar con el ahora sí, ahora no, con el agua al cuello siempre, con el dinero asquerosamente justo, con el agobio mes tras mes. Porque esta situación es cansina y agotadora. Y porque por circunstancias personales que no vienen al caso, empiezo a necesitar un empleo de manera imperiosa y urgente.
Así que cada mañana y cada tarde me meto en las páginas de empleo, me apunto a ofertas, tomo notas de empresas a las que escribir mails. Algunas responden amablemente, otras nada. Al principio frustra, luego ya te acostumbras y te resbala. Lo que me mosquea y de lo que os hablaba al principio es de lo que yo llamo “las ofertas bulto”. Son esas que aparecen siempre, que las ves, te llevas una alegría y respondes tan contenta porque cumples todos sus requisitos. Pero todos, aunque sean absurdos o una locura. Te piden que hables chino y lo hablas. Te piden que tengas un 35 de pie y lo tienes. Te piden que tengas el pelo cortado a tazón y lo tienes. Y dices, joder, me llaman seguro. Lo rellenas todo tan contento. Y al día siguiente compruebas con asombro que tu candidatura está rechazada. Y dices, bueno, pues habrá alguien que además de hablar chino, tener un 35 de pie y el pelo a tazón, la chupará de maravilla. Pero debe ser que no, porque a la semana o los quince días, la oferta reaparece misteriosamente. WTF!! Y tú vas y la echas de nuevo. Que igual no vieron tu maravilloso currículum. Añades una carta de motivación. Les escribes lo bien que lo haces todo y les adjuntas una copia larga de tus méritos, tus cursos y tus experiencias. Meeeeeeec, rechazada. Bueno, vale, me tienen manía. Y al poco tiempo, otra vez la oferta renovada en la página, que ya no sabes si echarla o pasar o llamar al FBI y decirles que vaya forma de tratar de espiar a la gente. O mi teoría del bulto, que es que la ponen para que parezca que hay más ofertas de que la realmente hay.
Obviamente no me refiero a esas páginas donde las ofertas se renuevan solas, no. Ni a esas que una vez inscrito no te puedes volver a apuntar. Me refiero a las que las ofertas sólo aparecen si están recién puestas y que te aparecen el número de candidatos apuntados. Y os aseguro que estas ofertas aparecen y desaparecen no sé con qué motivos oscuros. Y al parecer, no soy la única a la que le pasa.
Y por último, ya que hablo del tema de buscar trabajo y tal, diré que me jode la gente que te culpa de estar en el paro. Que te dice que eso es que no te mueves, que no buscas o que no haces nada. Porque encima de que te sientes una inútil, una mierda y tu autoestima baja por momentos cuando todo el mundo se permite cosas que están tan lejos de tu alcance que no puedes ni soñar con ellas, alguien te dice que tú eres la culpable de tu situación. Sí, me encanta no poder irme de vacaciones a donde me apetece, me encanta no poder comprarme caprichos, me encanta callarme cuando mis amigos hacen ciertos planes porque sé que no puedo apuntarme. Me gusta mucho, muchísimo, ahorrar tres meses para el cuarto poder hacer algún dispendio loco, como ir a cortarme el pelo. Me encanta que se estropee algo en casa y tenga que pedirle dinero a mis padres como si fuera una niña pequeña. Me gusta muchísimo esta especie de humillación constante. Me alegra mucho no querer casarme ni tener hijos, porque si quisiera estaría jodida. Así que por favor, si tenéis algún amigo en paro, a no ser que sea un claro caso de ni-ni por voluntad propia, no le digáis que si se mueve lo suficiente para encontrar algo. Porque hace pupita escucharlo.

Y nada, oye, que si alguien sabe de alguna vacante en su empresa o de lo que sea, que me lo diga. Que total, por intentarlo en un sitio más no pierdo nada.


6 comentarios:

  1. vivo lo que cuentas, la mayoría de veces no hago ni caso que bastante tengo ya con lo mío, pero otras es un golpe directo a la moral... mucho ánimo ><

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  2. No tenía ni idea de lo de las ofertas bulto. O sea, ofertas de trabajo basura he visto a patadas pero que aparezcan y desaparezcan, primera vez que lo veo...

    Estaré atenta por si oigo algo. Si quieres mándame tu currículum de todas formas a ver si consigo colarlo en mi empresa (bueno, en la empresa donde trabajo, se entiende), por si tuvieran algo. Besotes!!!

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  3. hola Naar

    hace tiempo que te leo y me encanta tu humor y tu manera de escribir y espero de todo corazón que encuentres alguna cosa pronto, cuatro años es mucho tiempo y se lo que puede machacar a uno la autoestima. Mucha suerte!!

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  4. Buf, parece que me hayas leído la mente. :( Yo no llevo tanto tiempo en paro, casi dos añitos, que se dice pronto, pero lo que cuentas me resulta taaaaaaan tristemente familiar! Todos los días me inscribo en ofertas... y es lo de más frustrante. Siempre te sientes poca cosa, por mucho que hayas invertido en formación, por más y más cursos, másters, idiomas, etc. que tengas; siempre es poco para toooooodo lo que piden. Y para luego pagarte una miseria, eh!!
    Y totalmente de acuerdo con lo que dices de la gente que nos critica por estar en paro, y que piensa que estamos "así" porque somos unas comodonas o unas vagas, que no nos movemos. Quiero creer que no saben lo que dicen, que hablan sin saber, porque no han estado ni un solo día en esta situación, para entender lo humillante y desquiciante que puede resultar. Es verdad que hay gente que vive del cuento, pero no son mayoría. La inmensa mayoría de los que estamos en paro, QUEREMOS TRABAJAR, HOYGAN.
    Ah, y luego están los que te quieren dar ánimos (pero zanjar rápido el tema) y te sueltan el tan manido: "Paciencia, ya saldrá algo". ¬¬
    En fin, guapa, mucho ánimo y mucha suerte. Me quedo por aquí.

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  5. Por lo menos tienes lo de tus padres y trabajillos que has ido consiguiendo, imagínate que no tuvieras eso... Tiene que ser durísimo estar en esa situación, solo puedo mandarte toda mi energía positiva.
    Lo de los anuncios para hacer bulto ya es como de traca. Fijo que es lo que piensas, vaya huevos que tienen.
    Un beso

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  6. No estoy en tu situación (de momento) pero empatizo totalmente con ella.
    Ojalá encuentres algo pronto que te devuelva no solo el dinero, sino la ilusión. Porque formarte y no conseguir nada, tiene que ser demasiado frustrante.

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