Este año el gafe me ha dejado unos cuantos sustos, pero
hasta ahora son relativamente pequeños. Relativamente, repito.
Quizás el peor de todos es que el día antes de mi cumpleaños
me encontré una rueda del coche pinchada. Yo iba a irme a hacer miles de cosas
y de pronto, oh, sorpresa, mi coche está más inclinado que la torre de Pisa. Llamé
al seguro, caminata para acá, caminata para allá, mandaron a un tipo, me puso
la de recambio, blablablá.
Conclusión, tengo que cambiar las ruedas. Y “no pasa nada”
porque ya estaban un poco gastadas y al fin y al cabo no me iban a pasar la
ITV. Así que dejaré de comer hasta el
verano para poner unas ruedas nuevas. Una operación bikini infalible que no sé
cómo va a salir, ya que desde que dejé el anillo vuelvo a estar tirando a escuálida.
El asunto es que tras mucho mirar por Internet, ayer fui a
uno de los sitios a ver qué me decían. Y es que lo de los mecánicos es
complicado. Ojosdepez sólo hace cosas importantes de motor. El otro al que amo
y aún no he puesto mote es de chapa y pintura. Y el lechuguino me pidió una
pasta por las ruedas que no se cree ni él que se lo voy a pagar. Así que vuelvo
a poner mi corazón a disposición de hombres fornidos con el torso desnudo lleno
de grasa y el mono azul atado a la cintura. No, atado más abajo, ahí donde se
ve esa V que se les marca a los hombres en el bajo vientre. Sí, eso. Ayomaque
ricosellos.
Decía que fui a un taller nuevo a informarme de cuántos
meses iba a estar sin comer. Y en esto que un chaval muy mono y muy sonriente
me dice cuando me estoy acercando que va a apartar un coche para dejar pasar a
la “shiquilla guapa”. Ese no era de aquí, obviamente. En Madrid ni te llaman “shiquilla”,
ni te dicen piropos gratis, ni sonríen tanto. Le expliqué que no hacía falta,
que quería entrar a preguntar algo. El muchacho, con un acentazo andaluz
cerrado y su enorme sonrisa me lo explicó todo haciendo oposiciones al nobel de
la paciencia. Me pidió los datos de la rueda y yo saqué mi chuleta “185, 65,
14, 87T”. Signifique lo que signifique, que tres cojones me importa. El chaval
me miró un momento con el ceño fruncido:
-
¿65 has dicho?
-
Sí.
-
¿Me habías dicho un 206, verdad?
-
Sí.
-
Pues es raro, suelen llevar ruedas más pequeñas.
-
No sé, he copiado los números del neumático, si quieres
sales y lo miras tú…
Os juro que por una vez no lo dije en mal tono. Era en
serio. No entiendo mucho del tema y quizás me hubiera equivocado o copiado mal
o vete a saber. Pero el chaval me miró fijamente a los ojos y dijo esa frase
que hace que se me caigan los palos del sombrajo. Y las bragas, eso también:
-
No. Te creo. Seguro que lo has mirado bien.
Vale, quítate la camiseta y poséeme aquí mismo entre las
ruedas cochambrosas. Y es que si algo en la vida me jode es que se ponga a pleito todo lo
que digo. Que a todo se me responda “¿pero seguro? ¿No lo habrás mirado mal? Deja
que vaya yo. Ya lo miro yo. Ya me encargo yo.” Me enfada porque me hace sentir
que no te fías de lo que yo hago y que si yo digo una cosa para ti vale lo
mismo que si maúlla el gato. No soy la más lista del mundo, pero cuando aseguro
algo, puedes apostarte una mano que no la pierdes. Si dudo, vete a comprobarlo,
pero si lo digo seguro, es que lo he mirado y remirado, no me pongas en duda, maldita sea. Es algo
que me jode enormemente del Ross. Y que me encanta del Niño Chico. Y de mi
nuevo mecánico de mis amores. Esas no réplicas valen mucho para la chalada que
soy.
Al final resulta que el muchacho es de Cádiz, que es mejor
cambiar las 4 ruedas que sólo 2, que hay que hacer un paralelo de no sé qué
diablos, que en caso de que cambie 2 las nuevas deben ir detrás y que en
cualquiera de los casos yo no voy a comer hasta julio. Del 2015.
P.D. debería hacer una etiqueta especializada en mecánicos y mi sincero amor hacia susodichos profesionales.
Jajajaja! Pues a mí me está gustando esto de los mecánicos! :-)
ResponderEliminarMe alegro :) seguiré informando, aunque espero no tener que hacerlo mucho porque no tengo dinero para más disgustos!!
EliminarSe te ha olvidado añadir que a éste le pagas lo que te pida porque te ha conquistado, no lo niegues bandida.
ResponderEliminarHombre, la verdad es que preferiría que lo pagara él, que yo estoy pobre como las ratas pobres XD
EliminarJijijijiji.....
ResponderEliminarJijijijiji......
(Son risas en plan amiga quinceañera)
Penaaaaaaa.... de no tener ese mecánico!!!.. en mio es sesentón...
Dile que te invite a comer y arreglas lo de la dieta forzada...si es que... lo tiene todooo este chaval!
No veo yo futuro ahí, eh? casi preferiría el mecánico viejo si me cobrara menos... o nada!! :D
EliminarPero tiene los 18 ya cumplidos? ;)
ResponderEliminarNo sé, igual con las ruedas nuevas te puedes meter en el mundo de las carreras nocturnas ilegales, y sacar algo para comer. XD
Besos, pero sin grasa, que luego no hay manera de quitarla
Yo diría que los 28 también ;)
EliminarLo de las carreras mola, empezaré a frecuentar suburbios de mala muerte a ver si me entero de algo. XD
Ayyyy, los mecánicos... Salí con dos (no al mismo tiempo, ¿eh?) y tienen un je ne sais quoi que me vuelve loquita. Y, si encima te dan la razón, ¿qué más podemos pedir? Jajaja. Besotes!!!
ResponderEliminar¿Has salido con dos mecánicos? eres mi ídola, oyes... Y yo venga a salir con pringaos, ingenieros, físicos, arquitectos... bah, yo quiero un mecánico!!!
EliminarVaya, perece que me equivoqué de profesión...
ResponderEliminar¡Cachis...!
Pues oye, igual sí, quién sabe!
EliminarSi es que los andaluces somos la caña, y los gaditanos más, mi primer novio fué un gaditano y el Futuro también lo es... ¿que tendrán estos de Cádiz?
ResponderEliminarDicho esto... yo quiero ese mecánico para miiii que en nochebuena se mojó la centralita de mi 307 y han tardado tres meses en arreglarlo, lo han mandado a otro taller, hemos tenido que buscar nosotros la pieza y para joder más, el coche no ha quedado bien....
Besotes shikilla guapa