Esta picante historia (y no
precisamente por la acepción guay de la palabra, si no por los
picores mortales que he sufrido) comienza hace ya meses. O años. O
qué sé yo. Se supone que yo siempre he tenido la “piel sensible”.
No llega a ser atópica, no llega a ser algo diagnosticable... pero
si no me embadurno en crema tras cada ducha, la tengo seca, tirante,
se me descama, me pica y se pone roja. Por supuesto, no puedo usar
cosméticos que irriten, ni cosas fuertes, ni hacer experimentos.
Tengo que ir con cuidadito para no despellejarme como una serpiente
en época de muda. Y aún así, cuando me doy un golpe, me pica un
bicho, me rasco un poco más de la cuenta o me roza algo dos veces
seguidas, ya la hemos liado. En fin, qué le vamos a hacer. A cambio
no me quemo con el sol a pesar de ser muy blanca (no lo tomo jamás
porque odio ponerme morena, pero podría) y cuando está en buen
estado tengo una piel muy fina y muy bonita.
Decía que la tortura empezó hace unos
meses que me salieron unas ronchas extrañas que se ponían rojas, se
descamaban, se hacían herida y cuando curaban me quedaba una
cicatriz oscura, como una mancha horrible. Nunca en mi vida había
visto algo así. Y no reaccionaban a nada, ni cremas, ni jabones, ni
cortisona... nada. Fui al médico de cabecera. Me mandó al
dermatólogo número 1. Dermatólogo1 me miró con cara de sospechar
que yo fuera reptiliana en proceso de transformación. Me mandó una
crema, me dijo que me hidratara mucho y me mandó a casa. Y que si no
se me quitaba en dos semanas, volviera.
A las dos semanas, volví, claro. Como
dermatólogo1 no parecía saber qué me pasaba, pedí cita con otro.
Dermatólogo2 resultó ser gilipollas integral. Me dijo que mi piel
era así de toda la vida y que no me habría dado cuenta. Le dije que
no soy ciega y que no había tenido esas ronchas tan horribles en mi
puta vida. Me dijo que seguro que tenía la parte trasera del brazo y
las nalgas llenas de granitos pequeños. NO. Me dijo que no me habría
dado cuenta. Me dijo que seguro que de pequeña había tenido
engordaderas. NO. Me dijo que ni mi madre ni yo nos acordaríamos. Me
dijo que ya que me ponía pesada (WTF!!) me mandaría una biopsia. Y
me echó de la consulta.
Tres semanas después me llamaron para
la biopsia. Las ronchas habían desaparecido y con las cicatrices no
se podía hacer nada.
Volví a mi doctora de cabecera. Me
dijo que si me volvía a pasar, fuera a urgencias.
Hace cosa de 15 ó 20 días, me
empezaron de nuevo a salir esas ronchas pero más pequeñas. Me cagué
en la puta de oros y en el rey de bastos. Antes de que me diera
tiempo a hacer nada, me empezó a salir un sarpullido. Me di la crema
de siempre de los sarpullidos y no me hizo nada. Me lavé con jabones
especiales y no me hicieron nada. El martes pasado, que era festivo,
estaba ya llena de granos desde el cuello hasta las ingles. Fui a
urgencias al ambulatorio. Doctor chino me dijo que me fuera al
Clínico a dermatología de urgencias. Allí descubrí que en el
Clínico no hay urgencias de dermatología desde hace 15 años.
Aplausos y ovaciones. Fui, me tomaron la tensión, la temperatura y
me hicieron preguntas rutinarias. No había comido nada raro, ni
medicamentos, ni jabones, detergentes, suavizantes, ropa nueva...
nada. Me pasaron con el médico. El médico me pinchó un polaramine
en el culo, me dejó coja, me dio una pastilla para el día siguiente
y me consiguió cita para dermatóloga3 para la mañana siguiente.
Dermatóloga3 no me miró, ni me tocó,
ni le interesó en absoluto lo que yo le contaba después de hacerme
esperar 40 minutos “porque no me tenía en la lista” y después
de tener que esperar al lado de un tipo que se arrancaba costras y me
las tiraba encima. Gracias, por cierto, fue muy poco perturbador ver
tu hoja de exámenes de pus, costras, hongos y demás mientras
arrojabas excrecencias a centímetros de mi pierna.
Dermatóloga3 lo único que me miró
fue una de las ronchas primigenias que se descaman y mandarme de
nuevo una biopsia. Le expliqué que para cuando me llamasen, se
habrían convertido en cicatrices, pero no pareció importarle lo más
mínimo. Del sarpullido, a pesar de ser más que escandaloso, no hizo
mención, “porque ya se quitaría con el tratamiento del día
anterior”.
Una semana después, la manta de granos
rojos no se me había quitado y cada vez me picaba más y se extendía
por las piernas y los brazos. Después de dos noches bastante malas,
una de ellas sin poder dormir nada por los picores y los pinchazos,
volví a urgencias a mi ambulatorio. Mi doctora de cabecera me puso
una inyección de polaramine y otra de urbasón haciendo que
anduviera como Chiquito de la Pradera durante el resto del día.
A día de hoy los granos han remitido
bastate por el urbasón, que hizo efecto casi inmediato, pero no
descarto que vuelvan cuando se pase todo el efecto ya que no han
desaparecido. La piel la sigo teniendo irritada y lejos de su estado
habitual. Me han mandado unas pastillas para la alergia que no me
puedo tomar porque tienen lactosa y lo que es bueno para el bazo es
malo para el espinazo. Además, ni siquiera está claro que lo que
tengo sea una alergia y no algo tipo autoinmune. Desde luego, no me
han llamado para la biopsia y las ronchas están casi convertidas en
cicatrices. Empiezo a parecer un dálmata.
Y sé que no tengo muy buena suerte con
los médicos en general, pero coño, no me puedo creer que esté
inventando una enfermedad nueva. No quiero pensar que dentro de unos
años alguien tenga un sarpullido y le diagnostiquen un Naar. Además,
estoy hasta el gorro. De picores, incomodidades, gente que te dice
que a su tío del pueblo le pasó algo parecido por comer gambas y de
que me sugieran ir por lo privado, cuando tres dermatólogos y tres
médicos más no han tenido ni puta idea de lo que es, como si al ver
el dinero se les fuera a encender la bombilla por arte de magia.
Estoy harta de llenarme de manchas, de tener cicatrices sin comerlo
ni beberlo y de no saber qué cojones me pasa.
Total, que estoy mu jarta.
a mí en ocasiones me han salido reacciones alérgicas en la piel. también he sufrido a dermatólogos inútiles y/o estúpidos, pero hay una mujer muy competente que se llama elisa pinto. te detecta lo que tienes nada más mirar y te da tratamientos efectivos.
ResponderEliminarespero que encuentres a algún dermatólogo al que no le hayan dado el título en una tómbola, y que sepa tratar a los pacientes como personas. quizá sea algo somático, por estrés, pero en cualquier caso debe de ser muy molesto.
besos y ánimo, ya nos contarás!
Tomo nota del nombre de la mujer por si acaso, Gracias!
EliminarA mi para mi boda me salió algo así, vaya marrón, e Irenota diciendo que era tiña jajaja
ResponderEliminares que era tiña!!! jajaja TIÑOSA!!
EliminarNo zorra, eso se desmintió.
Eliminar¿Quién lo desmintió? Si eres una tiñosa... no es mi culpa...
EliminarAdemás... se lo puedes preguntar a Maribel... que ella también tuvo tiña...
EliminarNo pienso mediar entre vosotras, so locas!! :D
EliminarA pesar de todo, me has hecho reír, con lo de diagnosticar un Naar. Qué grande eres.
ResponderEliminarPero en serio, ¡vaya panorama!!!!. Solo se me ocurre seguir insistiendo a ver si das con alguien un poco iluminado, porque obviamente algo tienes, y te lo tendrán que tratar.
Mucho ánimo y paciencia
Es que lo piensas, le ponen el nombre de quien lo descubre o del primero en padecerlo. Y no mola!!
Eliminar¡¡¡¡Hola!!!! Te leo muchas veces pero no suelo comentar.
ResponderEliminarHace años a mí me pasaba parecido, me ponía a morir, pero lo curioso es que antes de llenarme del sarpullido/ronchas/manchas y de todo, me daban unos cólicos brutales. Fui a urgencias 4 veces y me decían que era una alergia a algo(según lo que hubiera comido, pues a eso) y me pinchaban Urbason.
Fui a dos dermatólogos, a la médica de cabecera mil veces y nada, no me daban con lo que era, me dijeron incluso lo de las engordaderas ¿what?
Y harta empecé a mirar por Internet a ver qué podía ser lo de los cólicos y llegué a la conclusión de que era algo digestivo y pedí a la médica de cabecera que me diera cita para el especialista, lo cual hizo pero tardaba 5 meses en verme. Harta fui por lo privado, pero no porque al ver el dinero se iluminasen(tienes razón) sino por el tiempo, que me vio dos días después, y el médico, nada más verme con las manchas y según él amarilla, supo lo que era, piedras en la vesícula. A raíz de no tratarme a tiempo tengo intolerancia a la lactosa, tuvieron que quitarme la vesícula mediante cirugía y había más de 30 piedras, me quedé en 47 Kg y mido 1,71, imagínate. Entiendo que un dermatólogo no sepa de digestivo, pero en urgencias entré explicando lo que me había pasado y ni caso, y fueron 4 veces.
A ver si se te arregla y no diagnostican a nadie de un Naar. Yo también veo muy factible que sea algo autoinmune.
Besos.
Bueno, con los cólicos la tuve yo hace muchos años hasta que dieron con que eran de los ovarios... Yo me quedé en 36 kilos, era una pena verme. Y la intolerancia a la lactosa, qué me vas a contar si lo soy desde los 16 en el grado más severo que existe. Vaya rollo. Si al final lo único que necesitamos es salud!
EliminarJajaja no hago diagnósticos por escrito y menos sin imágenes. Lo cierto es que yo tengo una enfermedad sistémica (que afecta a varios órganos, entre ellos la médula ósea) que me la diagnosticó un dermatólogo solo con contarle lo que me pasaba y mirarme las "manchas" que me habían salido.
ResponderEliminarY es una enfermedad rara...
El resto de veces que fui a la consulta, siempre ponía a prueba a algún residente, y solían acertar.
Nombre tengo. Curación por el momento... no... así que vivo a base de antihistamínicos diarios desde hace muuucho tiempo.
(Aunque no sea la solución... si tienes picores, te puedo recomendar un antihistamínico que no da sueño y no contiene lactosa (acabo de comprobarlo) pero escríbeme un correo o como te venga bien... )
Si te mando una foto se la puedes enseñar a ese tío? O a alguien que conozcas que sea así tipo Hause que con verte sabe que te pasa? Por qué los médicos que me atienden nunca son como los de las series, ni listos ni guapos? Los conoces tú?
EliminarDespués de mi ausencia blogosférica no recuerdo de qué parte de las Hispanias eres pero en Sevilla hay un dermatólogo buenísimo que fué el único que le diagnosticó correctamente a mi padre las quemaduras de la cara producidas por brea.
ResponderEliminarSe llama Ismael Yebra Sotillo, sale en google por si vives cerca y realmente es muy muy bueno, a mi padre le hizo pruebas nucleares y de lupus. Espero que te mejores de verdad que eso es muy muy molesto. Un besi gordo!!
Soy de Madrid, así que la pena es que no me pilla cerca. De todas formas lo tendré en cuenta por si acaso. Gracias!!
EliminarVaya...siento mucho que te estén dando tanto la lata. ¿A ninguno de esos iluminados les ha dado por hacerte pruebas de alergias? A lo mejor es algo que tienes en casa y con regalarlo o tirarlo, asunto resuelto. Espero que se solucione pronto. Un besote y felices fiestas!
ResponderEliminarEs que no responde como una alergia y de momento no me han mandado al alergólogo, aunque es probable que termine yendo por mi cuenta. No tengo nada nuevo ni raro en casa, no tengo plantas o algo así. En fin, esperaremos a que vaya pasando.
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