martes, 5 de junio de 2012

joder, mamá

Yo quiero a mi madre, como todo el mundo. Pero como todo el mundo también, a veces la mataría. O la torturaría. O algo.
Anoche me acosté súper pronto porque hoy tenía que madrugar de cojones para llevarla a hacerse una mamografía. Así que, a pesar de dormir un poco regular y de encontrarme peor que regular, me he levantado a las siete y media. He conducido por ese Madrid endiablado de las horas punta y he aparcado en zona verde gastando unas cuantas monedas. Putas tragaperras sin premio.
De ahí entramos a la clínica, mi madre entrega el papel y se pone a rellenar formularios tan contenta. Hasta que la chica de recepción la mira, mira el calendario, mira el volante, vuelve a mirar a mi madre...

-         Esta cita es para el día 12.
-         No. – dice mi madre toda convencida. – es para hoy.
-         No, para el 12.
-         No, de eso nada. Es para el 5, o sea, hoy. – insiste como su la otra fuera tonta.
-         No, señora. Mire el papel. Aquí pone día 12.

Ganas de matar aumentando, aumentando…
Entonces mi madre coge el papel, lo mira y se echa a reír. Como si fuera divertido. Ahora sé de dónde he sacado este humor absurdo mío que me hace reírme de cosas que no tienen sentido.
Total, que salimos, vuelvo a coger el coche y vuelvo a atravesar Madrid de regreso a mi casa. Mi madre sigue diciéndome:

-         El caso es que yo estaba convencida de que era hoy. Es raro, yo no me suelo confundir con estas cosas. porque además pensé, “qué mal que sea martes que es el día que peor me viene.” Así que tenía que ser hoy.
-         Mamá, el día 12 también es martes. Todas las semanas hay un martes, de hecho.
-         Ya, pero yo creía que era hoy. Jejeje, todo será que hoy tuviera que hacer otra cosa y no me acuerde.
-         Todo será que el alemán te esté cambiando las fechas.

El día 12 la mando a la clínica de una patada en el culo, en serio.

7 comentarios:

  1. Pues es verdad, que a veces es pa matarlas. La mía se ha caído y se ha fastidiado una muñeca. Que la tiene hinchada. No hay manera de que ni yo ni mi padre consigamos que vaya al médico, prefiere estar quejándose todo el día pero en casa. Y nada. Que eso, que pa matarlas.

    ResponderEliminar
  2. Jajjajaajja! Madres: las quieres... pero a veces es para darles de comer aparte. Pero son madres y las queremos igual, qué le vamos a hacer.
    Besos.

    ResponderEliminar
  3. Uffff. A mí me hace levantarme, no ya mi madre, cualquiera, a las siete de la mañana para nada y no te digo yo dónde termina el volante...
    Si es que a las madres se les perdona todo!!! Besotes.

    ResponderEliminar
  4. Por lo menos lo tomó a broma, imagina si fuera del tipo que se equivoca y encima se molesta con los demás, q tb las hay, la mía no, pero conozco un par, jajaja.

    ResponderEliminar
  5. Ay estas madres! estan locas y consiguen volvernos a nosotras locas!
    Saludos!

    ResponderEliminar
  6. ¿Quieres sentir deseos de matar a una madre?, dale a la mía una cámara de fotos y ya verás.
    Un beso!

    ResponderEliminar

Estás aquí, has leído... así que comenta hombre ya!!