Como podéis ver, he borrado la entrada de los seis meses con el Niño. Yo no lo sabía, pero era una mentira. Apenas una semana después lo hemos dejado. Y aunque agradezco de antemano vuestro apoyo y vuestros ánimos, os diré que prefiero no hablar del tema por el momento. Así que no me preguntéis ni me digáis nada al respecto. Ya hablaré cuando tenga ganas y no vaya a ser hiriente.
Y tampoco quiero ánimos. En este momento no los necesito. No quiero escuchar eso de que me he llevado seis meses maravillosos porque no es verdad. No ha merecido la pena. Los dos hemos perdido demasiado y no hemos ganado nada. No me queda un bonito recuerdo porque ha sido todo empañado por la sucia mentira. No he aprendido nada nuevo. Y ya sé que el tiempo juega a mi favor y se me pasará el dolor aterrador que ahora me ahoga. Lo sé. Lo he hecho mil veces. Me importa una mierda comenzar de cero… otra vez.
Sólo me duele la idea de que cada vez que levanto cabeza, cada vez que me recupero, cada vez que salgo a flote, cada vez que soy feliz, entre todos los hombres del mundo se lo juegan a los chinos. Venga a ver quién jode ahora a Naar. Y a quien le toca, se frota las manos, sonríe maliciosamente y murmura “voy a destrozarle la vida”. Ay, ingenuos. Pues no tendríais que correr ni nada. A mí, a estas alturas. A ver si os enteráis, majos, y de paso me dejáis en paz de una puta vez. Que a mí ya no me duele nada. Que me jode en el momento, me cabrea, me ofende, me hace patalear. Pero que yo perdí el corazón hace años. Y que ya no me lo podéis romper en más cachos. Que ya, no hay quien pueda herirme. Porque además, cuando lo intentáis, sólo conseguís que me revuelva como una fiera y que saque la parte más envenenada de mí misma. Así que mucho ojo, que estoy peligrosa. Y podías haber nacido todos como chirimoyas. Me habríais sido de mucha más ayuda.
Por otro lado también he pensado otra cosa. Este blog nació en un momento jodido. Todo lo que he hecho desde entonces ha sido crecer y levantarme una vez tras otra. Y Naar es el reflejo de lo mejor de mí misma. De la fuerza arrolladora, de las ganas de vivir, de la capacidad de resurgir de mis cenizas. Naar es todo lo que quería llegar a ser y sabía que estaba en mi interior. Por eso ahora no puedo dejarlo a pesar de las circunstancias. Precisamente por eso. Porque este blog y Naar son mi fuerza, mis ganas, mi parte luchadora, mi yo guerrera, mi fuego y mi ariete. Ahora no puedo renunciar. Ni de coña. Y menos por una gilipollez semejante. Porque si cada vez que un tío me joda tengo que dejarlo todo y cambiar de blog no voy a dar abasto. Así que me quedo donde estoy.
Volveré a ser feliz. Pronto, espero. En cuanto pase este jodido mes de diciembre. O antes, quizás. Yo, ya lo he dicho, rehice mi vida yo solita. Y he sido muy feliz. Así que no me costará tanto hacerlo de nuevo.
y donde está escrito que necesitas un hombre para ser feliz?
ResponderEliminarYo quiero más entradas de vampiros adictos a la crema solar xD
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarHe borrado el anterior comentario porque estaba fatalmente escrito (jodida tablet...)
ResponderEliminarRepetimos:
Guapa, a pasar página y a otra cosa. Como bien has dicho, eres muy fuerte y puedes con eso y mucho más. Volverás a estar otra vez bien, seguro que muy pronto. En peores plazas has toreado...
Pero eso sí: no nos dejes sin Naar, eh? Me alegro un montón de que hayas decidido conservar el blog. Y si lo cerraras y abrieras otro, allá que nos iríamos nosotros a leerte. Lo sabes.
Un beso enorme y mucha fuerza, más todavía.
A resurgir de las cenizas como el ave fénix. Cuando a uno lo rompen en pedacitos por primera vez y logra reconstruirse, uno se vuelve como un rompecabezas, pueden cambiarnos las piezas de lugar, revolvernos, pero jamás volver a rompernos, tarde o temprano volvemos a colocar todas las piezas en su lugar, y con cada vez que nos rearmamos, aprendemos a hacerlo en menos tiempo. Deseo que pronto estés bien. Saludos.
ResponderEliminarMe quedo con tu fuerza, decirte cualquier cosa no creo que te ayude, asi que simplemente, mucho ánimo ^^
ResponderEliminarUn beso!
Por éso yo no me fío de ninguno. Que los coma el tigre, ellos se lo pierden!
ResponderEliminarEres superNaar y con tu lema de tirar pa´lante dentro de poco volverás a estar en lo más alto!
ResponderEliminarBesazos!
Si hay que zurrar a alguien, me lo dices.
ResponderEliminarMe voy a guardar el achuchón que me gustaría darte y me uno al comentario de Key Hunters.
ResponderEliminarPues vaya mierda. No voy a andar con rodeos: tú lo piensas y todos lo pensamos. Pues lo siento, querida Naar, que hayas roto con tu Niño. Así lo pienso, así lo siento, y así te lo digo.
ResponderEliminarUn besazo guapa!
LLevo varios meses leyendo el blog y sin comentar, mal, lo reconozco, pero uno es así de perro. El caso es que hoy al leer todas las novedades pues he sentido la necesidad de escribir.
ResponderEliminarNo te voy a mandar apoyos, ni ánimos, ni nada porque tú lo has dicho muy claro, no los quieres ni los necesitas. Así que sólo toca recoger la baraja, que esta partida de naipes ha acabado, a veces se gana, a veces se pierde... incluso en ocasiones, sales exactamente igual que cuando empezaste. Pero al menos, te has entretenido mientras jugabas tus cartas.
Un abrazo y disculpa si mis palabras no son las más apropiadas en estos momentos.
Salgo del anonimato para decirte, pues para decirte poco, porque ya te lo han dicho todo o casi todo. Y me siento un poco intrusa.
ResponderEliminarFuerte eres un rato largo, así que tienes medio camino hecho, :).
PD:tengo un terreno apartado y una pala, por si hay que enterrar algo con discreción.